Amsterdam es una ciudad popular, de eso no caben dudas. Cada año, miles de turistas se acercan a la capital holandeda atraídos por su liberalismo y tolerancia. Pero Amsterdam tiene mucho más para ofrecer al visitante que la legalización de la droga, los coffeeshops y la zona roja.
Esta magnética ciudad es un puzzle de islas y agua… Será muy difícil que no te sientas increíblemente atraído por su aura. ¿Quieres saber más sobre Amsterdam antes de organizar tu viaje?
Perderse caminando por los canales y puentes es una actividad inolvidable (y altamente recomendable) en Amsterdam. Parte de su encanto radica en esas pequeñas calles, en sus construcciones casi mágicas y en la extraña sensación de saber que estás caminando en tierra dos metros bajo el nivel del mar.
La vida nocturna de la capital de Holanda es inigualable. Restaurantes, pubs y magníficos cafés pueblan a diestro y siniestro toda la ciudad. Eso sí, como en la gran mayoría de las ciudades, debes tener cuidado de no caer en la trampa de los grandes restaurantes con precios para turistas, al fin y al cabo como mochilero, seguramente te interese ahorrar en la comida. La zona de Leidseplein, más conocido como la región del entretenimiento, tiene una gran cantidad de opciones aptas para todos los bolsillos. Un consejo si os gusta la carne: en las calles laterales de esa área, alejándote de la plaza central, encontrarás parrillas argentinas donde podrás comer buena carne asada a precios económicos.
Si te interesa conocer la cultura de la ciudad, no te pierdas el Museo Van Gogh y el Rijksmuseum, dos de las principales atracciones de Amsterdam, en donde deberás pagar entrada (14€ y 12,50€ respectivamente) pero que valen la pena. Y si aún te quedan ganas de seguir sumergiéndote en la cultura holandesa, Amsterdam tiene más de 50 museos (otra buena opción es el Museo de Ana Frank, sobre todo si te gusta leer), 140 galerías de arte y muchísimos monumentos. ¡No tendrás tiempo para aburrirte!
Los tulipanes son uno de los orgullos de la ciudad. Si te gustan las flores, en Keukenhof te sorprenderás por la cantidad, calidad y el delicioso aroma. ¡Un paseo diferente y gratuito!
Y por supuesto, en Amsterdam no puedes dejar de dar una vuelta por De Wallen, el distrito rojo, donde los escaparates con las trabajadoras del sexo atraen las miradas de los turistas. Más allá de eso, la arquitectura de la zona es formidable, al igual que la calidad de sus restaurantes.
Después de tanto caminar, seguramente necesites de un lugar cómodo y a buen precio para descansar y prepararte para tu siguiente día de viaje. No te pierdas entonces nuestras sugerencias de albergues en Amsterdam.
Imagen: kevinrosseel